He dado en el clavo
sin agujerear la madera
encontré este tornillo
sin conectar las piezas
repuntaba sin hilo
aflojaba tus huellas.
Esta escalera
se llenó de flores
porque le dije que vendrías.
Aprende a perdonarte
tus deudas del pasado,
porque tú también lo habrías hecho
si vieras al lugar al que te han llevado.
Los escasos rayos de luz,
que se cuelan entre las nubes
siempre me hablan de ti
porque el solo se fue contigo
cuando te fuiste.
Buscamos historias profundas,
pero evitamos los textos demasiado largos.
Qué cantidad de palabras dedicadas a lo que echamos de menos y qué poco agradecimiento, a los que siguen con nosotros viviendo cada momento.
Si tengo que volver
será contigo
ningún camino será marcha atrás
porque tú estarás conmigo.
Cruzo el río
saltando entre las rocas
y mis pies besan el frío
como si no llevara botas.
Así es añorar lo vivido
un paseo que te entumece
la boca.
El perfil de su llave
estaba hecha de su esencia:
nada de palabras frugales,
solo acciones y paciencia.
El arte toma la forma de las grietas
por las que estamos rotos.
Tus caricias
atraviesan la barrera del tiempo
y de la realidad
para tranquilizarme
como cuando era un niño
los días que azota el vendaval.
Visualiza estas palabras
como si estuvieran esculpidas
en un cartel de granito
frente a un acantilado
que diga:
Aquí no es.
Ahora
que leo mucho menos que antes
mi casa
ha perdido muchas puertas
y algunas ventanas.
Cada cierto tiempo
se vuelve una necesidad
restaurar las obras de arte
así que deshazte
de todo aquello
que no te deje ser
realmente tú.
Pasó tan fugazmente
como solo puede pasar
el mejor verano de nuestras vidas.