En el centro de aquella tempestad, el olvido bailaba bajo la lluvia como si las nubes fueran bombarderos de guerra.
No menos peligroso es confundir los ecos del tren que se fue, con los de aquel que está aún por llegar.
Muchas veces buscamos excusas inconscientes para evitar admitir que lo que realmente tenemos es un profundo miedo a que nos hagan daño de nuevo.
Hay personas que son oro puro, que se cuelan entre las grietas de tu ser recomponiendo todos y cada uno de los fragmentos que se han resquebrajado en tu vida.
Me tiré a la piscina sin pensármelo dos veces, pero el tiempo y la distancia habían congelado toda la superficie.
Qué bien se está sin atarse a nada,
hasta el día en el que viene un huracán.
Algunas cosas nunca cambian
aunque ya sean totalmente diferentes.
Eso no debería ser sorprendente,
salvo para quien sus historias,
dejan de ser ya convincentes.
Todo cae por su propio peso, pero a veces no sé muy bien por qué, nos empeñamos en sostener algo que debió hundirse en el pasado más profundo.
Cuando la herida desapareció,
la venda que cubría mis ojos lo hizo también
y entonces descubrí,
que marcharte fue el mejor regalo
que jamás me habías hecho.
Me cuesta alcanzar los sueños del estante de arriba,
no sé dónde está la media langosta que me correspondía
y el tiempo se me ha vuelto a pasar.
Qué complicado resulta algunos días
seguir la receta de la felicidad.
Disección de echarte de menos:
Cómo eras entonces,
lo que yo sentía
y lo que el tiempo ha mitificado.
No llegas ni a llenar la mitad
de aquellos recuerdos pasados.
Aunque nos digan lo contrario,
aún tenemos tiempo para creer,
todavía queda espacio para crear.
Tan solo si te hubieras vuelto,
el día que te fuiste.
Tan solo si hubieras vuelto,
al año de que te fuiste.
Tan solo hubieras vuelto,
a la vida de la que te fuiste.
No sé cómo te recordará mi cerebro con los años, por eso quiero dejar aquí por escrito que fuimos perfectos hasta que el tiempo fue imperfecto.
Nunca pensé que las palabras que un día escondí por si pudieran ayudarte, pudieran llegar algún día a salvarme.