Piensa con detenimiento dónde plantas tus ilusiones, pueden llegar a crecer más fuerte que las malas hierbas.
Todas mis virtudes son también mis defectos, armas de doble filo que siempre terminan por herirme aunque vaya venciendo.
El viento dio la vuelta al mundo para reencontrarse con la veleta en las alturas. Porque a veces, las cosas más antiguas, son las que más nos hacen cambiar.
Un nudo se rompía por presión, una cuerda se deshacía por tiempo y ella seguía saltando entre lianas, por el miedo a caer en un olvido lento.
Siempre que salgo de tu casa llueve. Y ya no sé, si es una señal diciéndome que no debería marcharme o una invitación a no dejar nunca de correr.
A ti, perfecta desconocida, hoy puedo decirte que mientras tú pensabas en robar libros, yo he raptado un recuerdo que nos acompañará siempre. Un día podré decirte, que lo tuve claro desde el primer día.
Cuando la realidad y el tiempo firman un pacto de no agresión, la incertidumbre se apodera de todos los aspectos de nuestra vida.
Para poder enterrar el hacha de guerra, primero, tendremos que dejar de necesitar llevarla encima, para defender nuestras vidas.
De pronto aparece alguien que nos hace tomar consciencia de que teníamos miles de fibras que habían olvidado cómo sentir.
Cuando todo esto pase vuelve a buscarme que yo haré lo propio y podremos continuar este viaje hacia donde encontremos lo mejor de nosotros.
Un engranaje eran los momentos, el otro las personas ¿Cuántos giros son necesarios, para que coincidan los dientes correctos?
Todo lo que parabas en el colegio, lo detienes hoy en el amor. Solo que ahora pierdes mucho más de lo que ganas.
Todos tenemos en nuestras cabezas una lista de nuestra pareja ideal. Luego conocemos a esa persona y nos damos cuenta de que determinados universos no cabe en una hoja de papel.
Eres luz y mientras haya una mínima claridad que esté esperándome me veo capaz de enfrentarme a cualquier oscuridad que se nos presente en la vida.
Aquel libro en la pared con la portada del mar, era lo más parecido a una ventana al exterior que ella había podido encontrar en su vida.
Marco
Abr 23, 2020 at 10:15 pm
Muy buenos microcuentos me han gustado mucho.
No conocía tu web, pero desde ahora te seguiré por Twitter seguro!
Un saludo
Francisco Martiñán
Abr 25, 2020 at 10:32 am
Muchas gracias Marco, me alegro de que te hayan gustado, nos vemos por twitter 🙂
Un saludo!